¿Cuál es el tratamiento para la periimplantitis?

La periimplantitis es la enfermedad de los tejidos blandos y duros que rodean al implante dental, consiste en una inflamación de los tejidos blandos que rodean al implante junto con una destrucción del tejido óseo que soporta el implante. La periimplantitis se trata de una complicación tardía que afecta al periodonto que puede llevar a la pérdida del implante.

La periimplantitis puede estar causada por diferentes factores como:

  • Enfermedades periodontales previas
  • El consumo de alcohol y tabaco
  • Mala higiene oral
  • Diabetes
  • Una mala colocación del implante dental
  • Calidad ósea.
  • Factores sistémicos.
  • Riesgos ocasionados por trauma quirúrgico.
  • Contaminación bacteriana durante la inserción.
  • Mala distribución de las fuerzas que generen sobrecarga.
  • Tipos de superficie del implante
  • No tiene una adecuada estabilidad primaria

Los criterios clínicos usados para el diagnóstico de la periimplantitis son:

  • Enrojecimiento de la mucosa periimplantaria.
  • Sangrado y/o supuración al sondaje.
  • Profundidad de sondaje mayores de 6 mm.
  • Pérdida ósea periimplantaria radiológica.
  • Dolor a la percusión.
  • Movilidad.
  • Persistencia de dolor y malestar.
  • Presencia radiológica de reabsorción ósea
  • Presencia de placa bacteriana y calculo alrededor del implante dental.

Tratamiento para la periimplantitis

El tratamiento de la periimplantitis se tiene como objetivo la aplicación de medidas infecciosas, y conseguir la desestructuración mecánica de la placa bacteriana y la reducción de las bacterias que causan estas patologías. Evitar la inflamación e infección de los tejidos dentales periimplantarios y prevenir la formación de un biofilm patogénico minimiza el riesgo de periimplantitis, así como el riesgo de fracaso de los implantes dentales.

El tratamiento de la periimplantitis tiene diferentes fases dependidendo del grado de destrucción y afectación ósea, entre ellos tenemos:

  • Tratamiento regenerativo de los defectos óseos, eliminando el tejido de granulación para destruir las bacterias que han causado la infección. De este modo se reduce la inflamación.
  • Tratamiento de la superficie del implante para eliminar la placa bacteriana acumulada.
  • Tratamiento de los defectos óseos, realizando un curetaje de las lesiones periapicales y utilizando materiales para sustituir el hueso dañado. De este modo se evita la progresión de la enfermedad.

Como tratamiento se combina el uso de antibióticos junto a la realización de un desbridamiento subgingival o raspado subgingival que se realiza manualmente. El tratamiento consiste en combinar el tratamiento mecánico y químico; el tratamiento mecánico consiste en desestructurar la placa bacteriana, y el tratamiento químico se realiza con antisépticos como la Clorhexidina al 0,12%, en combinación con el cloruro de cetilpiridino al 0,05% sin alcohol.