Qué debo hacer si mi hijo se le ha roto un diente?

Cuando somos niños vamos sin preocupaciones, jugamos como si de una guerra se tratara; es por esto que nos preocupamos en cómo va a salir mi hijo hoy del colegio, con la camiseta rota o todo manchado, pero ¿y si viene con un diente roto? Entonces, ¿qué hago? ¿Cuál es el mejor procedimiento que debo hacer? ¿guardo el trozo de diente roto? Y si no he encontrado ese diminuto trozo de diente, ¿qué debo hacer? Bien, vamos a ir poco a poco.

Y es que es muy común que los niños que jugando se rompan un diente, es más común en niños que en niñas ya que ellas suelen ser más calmadas y jugar a juegos más pasivos, en cambio los niños suelen ser más brutos, jugando a fútbol, gestando batallas en el patio e incluso peleándose porque esa pelota era suya y se la han robado.

Entonces, vamos a explicar poco a poco ya que no todos los niños se rompen un diente de una misma manera, dependiendo del golpe puede llegar a ser desde una pequeña fisura a fracturarse toda la corona del diente, por lo tanto, no actuaremos de igual manera en ninguno de los dos casos.

Vamos a empezar con lo más fácil, ¿qué pasa si mi hijo viene con una pequeña fisura en el esmalte? Esta pequeña fisura, es una fractura incompleta del esmalte sin pérdida de sustancia dental. ¿Qué debo hacer? Tranquilizarnos, únicamente en el dentista se le hará una revisión para ver que no va mas allá y que no hay nada más afectado. El único problema que podría presentar es que se le tiñera con el tiempo, pero esto se soluciona con una higiene bucal.

Y ¿si se le ha fracturado más allá del esmalte? Si encontramos el fragmento del esmalte tenemos que guardarlo y traerlo al dentista inmediatamente, es en la consulta donde le harán la revisión con radiografías y miraran que este diente siga vital, entonces si tenemos el fragmento se lo volverán a cementar. En el caso de que no lo encontremos, le realizaran la reconstrucción del diente.

Es importante que llevemos a nuestro hijo inmediatamente al dentista ya que si tardamos más de 24 horas el tratamiento podría variar dependiendo de la formación de la raíz.

Podría pasar que se le fracturara además de la corona, la raíz del diente y dependiendo de la extensión de la fractura podrían desde estabilizar el diente hasta exodonciarlo, esto lo determinara el dentista mediante radiografías y realizando una exploración clínica.

Pero ¿y si no se rompe el diente? ¿Y si se mueve de su posición habitual? Entonces acude al dentista inmediatamente, es ahí donde le realizaran la revisión y con radiografías verificaran si se ha movido o no.

  • Si no se ha movido de su sitio, debes tranquilizarte ese diente tiene un buen pronóstico.
  • Si se ha movido del alvéolo dental le realizarán una reposición del diente siempre y cuando no hayan pasado más de 48 horas, (ya que pasado este tiempo no siempre se puede reposicionar) y se ferulizará durante un tiempo para que se mantenga estable.

¿Y si del golpe se le cae el diente? ¿Se puede volver a colocar en su sitio? ¿Cambia si es un diente definitivo o es temporal? ¿Qué hago si encuentro el diente?

En este caso se llamaría avulsión, estas situaciones no se suelen dar muy a menudo, pero en el caso de que pase tendremos que tener en cuenta si el diente es temporal, es decir, que lo cambiara por los permanentes o si es un diente definitivo.

Si es un diente temporal este no se reimplantará ya que se podría dañar el diente permanente intentando reimplantar el temporal. Si es un diente definitivo entonces sí que se podría reimplantar.

Primeramente, trataríamos de tranquilizarnos, si tenemos el diente es importante que lo pongamos en un recipiente con leche, saliva del niño o suero fisiológico e ir lo más rápido posible a la consulta dental ya que cuanto más tarden en reimplantarlo el pronóstico de ese diente cambiará.

Es importante que si nuestros hijos practican deportes de riesgo los protejamos. Para esto existen protectores bucales, que evitaran todos estos problemas en un futuro. Los protectores bucales son unas prótesis especiales que previenen los traumatismos, estos les protegerán los dientes, los tejidos blandos como las mejillas o la lengua, los huesos maxilares y la articulación. Actúan distribuyendo las fuerzas del golpe impidiendo que contacten las arcadas entre sí, ajustando la posición de la articulación y reduciendo la presión del cráneo.

Existen diferentes tipos de protectores bucales, estos varían de precio según la posibilidad económica de cada uno. Por eso es importante que conociendo esta alternativa la utilicemos y así podremos evitar esos pequeños sustos que nos dan en el día a día.