Cuando un paciente pierde la mayor parte de su dentadura y no puede ser rehabilitado con prótesis fijas sobre sus propios dientes, debe ser tratado con Implantes dentales para que las prótesis puedan atornillarse sobre estos y el paciente pueda disfrutar de una dentadura que imite al máximo a los dientes naturales.
Cuando no existe la opción de que el paciente sea tratado con Implantes dentales, entonces el paciente está condenado a utilizar una prótesis removible por el resto de su vida. Cuando esto ocurre, por lo general el paso del tiempo y la reabsorción que se produce en el hueso van haciendo que estas prótesis removibles se desajusten y el paciente comience a sufrir muchas molestias y a sentir mucha dificultad a la hora de comer.
Para compensar esta situación tan incómoda para el paciente, existe una alternativa que puede mejorar muchísimo su calidad de vida.
Sobredentadura sobre dientes
La sobredentadura sobre dientes se lleva a cabo siguiendo los mismos principios que se aplican a una sobredentadura sobre implantes, siendo la única diferencia, que está irá apoyada sobre las raíces que puedan permanecer en la boca del paciente.
Es muy importante que estas raíces estén ubicadas de tal manera que la prótesis se apoye de forma equilibrada. Lo ideal es apoyarlas sobre los caninos.
Si el paciente tiene otros dientes remanentes en lugar de los caninos y estos pueden permanecer en boca, también serán de utilidad, ya que por mínima que sea la retención que estos proporcionen, siempre será mayor que la retención que existe en una mandíbula reabsorbida por la ausencia dental.
Generalmente las sobredentaduras sobre dientes, al igual que las sobredentaduras sobre implantes, se instalan en el maxilar inferior, ya que en el superior el paladar aumenta la superficie de retención de la prótesis y no es necesario acudir a esta técnica, para el correcto ajuste de la dentadura postiza.
Ventajas de la sobredentadura sobre dientes
- El paciente estará más cómodo a la hora de hablar, comer y sonreír.
- El coste de este tratamiento es muy inferior a un tratamiento realizado con implantes dentales, lo que lo hace muy accesible a aquellas personas que no pueden permitirse el tratamiento de implantes y desean una prótesis que se retenga mejor que una dentadura apoyada exclusivamente sobre la encía.
- Si se cuenta con unos caninos remanentes en buen estado, la prótesis tendrá un altísimo porcentaje de éxito, similar al que se logra cuando se hace sobre implantes dentales.
- No es necesario que el paciente sea sometido a ningún tipo de cirugía, excepto por las extracciones que si deban llevarse a cabo.
Cuando aplicar este tratamiento
Siempre que los implantes dentales estén contraindicados o cuando el paciente simplemente no los pueda realizar por razones económicas, se debe pensar en este tipo de tratamiento.
Por supuesto, es necesario que al menos queden 2 dientes remanentes en buen estado para que sirvan de soporte a la prótesis dental.
Cuando un paciente cuenta con dos o tres dientes remanentes, se debe tener la previsión de este tipo de tratamiento. Extraerlos sin tomar en cuenta que podrían ser de gran utilidad, es perder la oportunidad de ofrecer un tratamiento mucho más beneficioso.
Siempre habrá tiempo para la extracción dental, así que ante la presencia de algún diente que pueda servir de retención, este debe ser el tratamiento de elección.
Conservación del reflejo nociceptivo
La presencia de dientes no solo sirve para la retención de la prótesis, sino también para conservar el reflejo nociceptivo. El reflejo nociceptivo es la capacidad de respuesta que ofrece el ligamento periodontal, es decir la encía, cuando percibe fuerzas. De este modo el paciente no morderá sin control como ocurre en los pacientes totalmente edéntulos con o sin implantes dentales.
Los pacientes que utilizan implantes dentales pierden este reflejo nociceptivo. Por ello siempre que se pueda dejar algún diente sin que interfiera con el diseño de las prótesis, será una decisión beneficiosa para el paciente.
Esto no debe ser tomado en cuenta si el diente se encuentra en una ubicación que en lugar de beneficiar el tratamiento, pueda perjudicarlo. Por ello esta decisión la debe tomar el especialista en implantes dentales en base al diagnóstico y al diseño de la prótesis que se ajuste al caso.
Procedimiento para realizar una sobredentadura
Los dientes remanentes deben ser tallados a modo de coronas y si es necesario, el nervio dental será tratado.
Una vez tallado se toma una impresión que se enviará al laboratorio protésico para confeccionar unas cofias metálicas que serán cementadas sobre estos muñones y servirán de apoyo y de retención para la sobredentadura.
Las sobredentaduras son una opción muy válida. El paciente se sentirá mucho más satisfecho con el tratamiento si la prótesis está retenida sobre unos dientes, que en los casos en donde la prótesis apoyada solo en la encía, se este moviendo y desalojándo constantemente.