Cepillos de dientes eléctricos, ¿cuál debemos comprar?, técnicas de uso

La higiene bucodental es muy importante para poder mantener una adecuada salud oral. La mayoría de patologías dentales están asociadas a una carencia de higiene dental, por lo que para evitar estas situaciones es importante realizar una correcta técnica de cepillado, ya sea con un cepillo manual o un cepillo eléctrico.

Los cepillos de diente eléctricos tienen muchos beneficios en comparación con los cepillos manuales. Estos eliminan la placa de mejor forma que los manuales por su acción rotativa y oscilante por lo que reducen la gingivitis más eficazmente. 

Muchos pacientes consideran que es más fácil y sencillo utilizar un cepillo eléctrico que manual ya que existen varios tipos adaptándose a las características de cada persona y encontrando así el cepillo ideal. 

Los cepillos dentales eléctricos realizan la acción de higiene bucodental por si solo de modo que solamente es necesario guiar al cepillo eléctrico por todas las superficies de los dientes. Esto hace que se elimine la acción de tener que mover de un lado a otro por todos los dientes el cepillo. 

Además, con esto se consigue que muchas personas con enfermedades sistémicas, como la artritis reumatoide, puedan lavarse los dientes sin ningún problema. Y en los niños, el cepillado dental puede realizarse con más eficacia, siempre y cuando un adulto supervise el cepillado una vez terminado.

Normalmente los cabezales de los cepillos eléctricos son más pequeños y redondos por lo que se adaptan con total facilidad a las superficies de los dientes y se puede higienizar adecuadamente todos los rincones de la boca. 

Algunos cepillos dentales eléctricos incluyen varias tecnologías permitiendo mejorar los hábitos de limpieza dental. En muchos hay un temporizador de unos dos minutos, por lo que esto sirve de guía durante el cepillado para garantizar una buena higiene bucodental. También en algunos modelos hay unos sensores de presión los cuales indican que el cepillado es demasiado fuerte, y así no dañar el esmalte dental. Hoy en día algunos cepillos eléctricos vienen con varios modos de limpieza para poder elegir la opción que se adecue mejor en cada etapa. 

¿Qué cepillo de dientes eléctrico debemos comprar?

En el mercado actual hay una gran variedad de cepillos dentales por lo que a veces no es nada fácil saber elegir el mejor cepillo. 

Es recomendable pedir consejo al odontólogo o al higienista dental para poder saber cual es el cepillo más adecuado para cada persona en particular y, así, poder garantizar una buena higiene bucodental. 

Para comprar un cepillo de dientes eléctrico es importante que los cabezales de este sean pequeños y con unos filamentos que permiten llegar a las zonas más difíciles de la boca. Además, estos filamentos se recomienda que sean suaves para no lastimar la encía y los dientes. La mayoría de cepillos dentales eléctricos cuentan con un mango ergonómico antideslizante para facilitar su uso.

Se recomienda que los cepillos dentales eléctricos sean de batería recargables y no de pila ya que estos primeros tienen mayor capacidad de realizar movimientos vibracionales y rotacionales, por lo que la remoción de la placa bacteriana es mayor. 

Técnicas de uso de un cepillo de dientes eléctrico

Para que el cepillo eléctrico realiza una buena higiene de los dientes, es imprescindible hacer un movimiento correcto y la precisión justa para poder obtener estos beneficios, antes comentados, de los cepillos de dientes eléctricos. 

Para poder realizar una buena técnica de cepillado con un cepillo dental eléctrico es imprescindible que este esté cargado para no interferir con la técnica de cepillado ni perder la potencia durante el cepillado dental. También, es importante que los cabezales de los cepillos eléctricos se cambien cada 3 meses, garantizando una higiene bucodental excelente. 

Una vez cargado el cepillo, se añade un poco de pasta de dientes fluorada sobre las cerdas del cepillo eléctrico para poder prevenir los dientes de la caries. Habitualmente los cepillos dentales hacen una pausa cada 30 o 40 segundos. La cavidad bucodental se divide en 4 cuadrantes, dos arriba (izquierda y derecha) y dos abajo (izquierda y derecha). La pausa breve durante el cepillado indica que se debe cambiar de cuadrante y continuar con el resto. 

Se debe pasar el cepillo de dientes por todas las superficies de los dientes (vestibular, lingual o palatina, y oclusal) con una ligera presión sobre ellas y unos movimientos suavemente circulares, el resto del trabajo lo hace el propio cepillo eléctrico. 

Es fundamental que después del cepillado dental con el cepillo eléctrico se haga uso de hilo dental o de cepillos interdentales para limpiar las superficies que con el cepillado eléctrico no se llega, las superficies interdentales o interproximales (las zonas que están entre los dientes).

Se debe realizar esta técnica de cepillado tres veces al día, siendo la de antes de dormir la más importante ya que es cuando la cavidad oral estará más tiempo sin contacto con el exterior. Además, las revisiones periódicas con el odontólogo son imprescindibles para poder mantener y garantizar una buena salud bucodental.

REFERENCIAS

  • Cuenca E, Baca P. Odontología preventiva y comunitaria: principios métodos y aplicaciones. 4a ed. Barcelona: Masson; 2013.
  • Grender J, Williams K, Walters P, Klukowska M, Reick H.Plaque removal efficacy of oscillating- rotating power toothbrushes: review of six comparative clinical trials. Am J Dent. 2013;26:68-74. 
  • Robinson PG, Deacon SA, Deery C, et al. Manual versus powered toothbrushing for oral health. Cochrane Database Syst Rev 2005;(2):CD002281. 
  • National Health Service. Department of Health. Delivering better oral health. 3rd ed. Barcelona: Public Health England Publications; 2014.