Todos hemos soñado en algún momento de nuestra vida con tener una “sonrisa de Hollywood”, esa sonrisa perfecta, simétrica y como no, blanca.
¿Cómo conseguir que tus dientes blanqueen y estar más cerca de ese sueño?
En las clínicas dentales de Barcelona es muy popular la realización del “Blanqueamiento”. Se puede elegir entre el blanqueamiento en clínica, que consiste en la aplicación del producto que está compuesto de Peróxido de Hidrogeno que se deja expuesto a la luz fría. La duración de este procedimiento de blanqueamiento en la clínica dental es de unos 60 minutos.
Al ser un producto que al contacto con la mucosa puede llegar a irritar por unos instantes, el odontólogo se asegura que no contacte con los tejidos, gracias a la barrera gingival que aplica por el borde de la encía antes de empezar con el tratamiento.
Como en ocasiones el paciente desea tener unos dientes muy blancos, se aconseja el tratamiento de blanqueamiento dental combinado. La metodología es la misma que el de clínica, con la diferencia que una vez sales de consulta, el tratamiento sigue en casa. Para ello se tomaran unas impresiones de los dientes antes de iniciar el procedimiento en la clínica y con estas impresiones se realizarán las férulas de blanqueamiento que se utilizarán en casa, colocando en la cara externa de cada diente hasta los premolares (con un total de 8-10 dientes) en forma de puntito, el agente blanqueador.
Debemos seguir unas pautas para que los resultados sean eficaces y conseguir el resultado deseado. Lo ideal es utilizar las férulas con el producto blanqueante 8 horas diarias y un mínimo de 4 horas, siempre seguido y sin interrumpirlo. El paciente puede elegir si desea realizar el procedimiento durante la noche o durante el día. Los pacientes que han tenido ortodoncia y ahora llevan la retención o alineador removible que utilizan para dormir, tienen la ventaja que con la misma férula de retención la pueden realizar el tratamiento de blanqueamiento, siguiendo el mismo procedimiento de colocar el producto hasta los premolares y limpiándolo después con agua y un cepillo para quitar los restos.
Hay ciertos hábitos diarios que deben ser suspendidos durante el periodo de tiempo que dura el tratamiento. La ingesta de algunos alimentos o bebidas pueden pigmentar los dientes y ralentizar o incluso frenar el proceso de blanqueamiento. Quedan prohibido las bebidas o alimentos como vino tinto, café, té, Coca-Cola, fresas, cerezas, tomates, etc. Y todo lo que sea ácido, como pueden ser los limones, naranjas, kiwi, entre otros. Además de los alimentos es preciso suspender el hábito del cigarrillo.
Si tuviéramos que poner algún inconveniente a este fantástico tratamiento sería el de la sensibilidad que se puede llegar a generar, no obstante, es una sensibilidad transitoria y no pasa en todos los casos. Cada persona reacciona de diferente manera, hay pacientes más propensos a sufrir de sensibilidad que otros.
Si sucediera y sintiera esa sensibilidad en casa durante el tratamiento combinado, es tan sencillo como detener el tratamiento 1 o 2 días y luego continuar con este. Igual después de la aplicación del producto blanqueante en clínica por el odontólogo y transcurrido una semana, se realiza un control con su dentista para ver el progreso y saber si ha sentido sensibilidad o no. Después de tal valoración si quisiera seguir blanqueando, se prolongaría una semana más, decidiendo el doctor, en el caso de sensibilidad, rebajarle la concentración de las jeringas de agente blanqueador al 10%, en lugar del 16% que es el utilizado comúnmente.
Hay casos en pacientes fumadores graves o con problemas de tinción en el esmalte por la toma de tetraciclina, que no sería aconsejable recomendarles el tratamiento de blanqueamiento ya que no conseguiríamos un resultado óptimo.
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