FACTORES ETIOLÓGICOS DE LAS MALOCLUSIONES

La ortodoncia es una ciencia, especialidad de la odontología, que basa sus objetivos en la corrección, ósea y dental, de las estructuras faciales, con la finalidad de alcanzar aquellas normas estéticas que deciden los padres, el paciente y el profesional, con su mejor criterio, para rehabilitar social y psicológicamente al propio paciente.

El funcionalismo que condiciona la forma va asociado al crecimiento. Deben conocerse las causas de maloclusión (la etiología) y corregirlas.

¿CUÁLES SON LOS FACTORES CAUSANTES DE LAS MALOCLUSIONES?

El origen de la maloclusión puede venir de tres grandes factores: generales, locales o hábitos y disfunciones.

Factores generales de la maloclusión

La herencia es uno de los factores etiológicos más importantes, ya que la herencia trasmite: un potencial de crecimiento de los huesos, un patrón de los músculos y una morfogénesis de carácter localizado (la forma y tamaño de dientes, entre otros). Cuando algún de estos puntos es exagerado se da un desequilibrio que lleva a una maloclusión.

Otros factores etiológicos generales serían las cromosopatías (alteraciones hereditarias, como el síndrome de Down), malformaciones congénitas (como la hendidura palatina), factores ambientales, enfermedades (hipertiroidismo, raquitismo), traumatismos y radiaciones (inhibiendo el desarrollo correcto).

Factores locales de la maloclusión

En dientes temporales, pueden ser causantes de maloclusiones los siguientes factores locales: una pérdida prematura de dientes temporales (por caries, por una erupción precoz de los dientes permanentes, por traumatismo, entre otros) y también por una retención prolongada de los dientes temporales, más tiempo en boca de lo que deberían (por agenesia del diente permanente, falta de diente, o anquilosis, unión muy fuerte con el hueso).

En dientes permanentes, los factores causantes de maloclusiones pueden estar relacionados con el número (más o menos dientes de lo normal), el tamaño (que los dientes sean más grandes o más pequeños), la forma y la cronología y dirección de erupción de los dientes (si los dientes salen por zonas anormales). Así como la discrepancia entre el espacio y dientes o interferencias en la longitud de la arcada, por frenillos, patrón muscular o interferencias funcionales.

Hábitos y disfunciones

Los hábitos son formas de hacer de manera incontrolada, automática, involuntaria, repetitiva y permanente. Estos modifican la posición de los dientes, forma, alterando el crecimiento y función, y la relación entre maxilar y mandíbula.

Algunos de estos hábitos podrían ser: succión anormal biberón, succión anormal chupete, succión digital (del dedo o dedos), succión labial (normalmente del labio inferior), protracción lingual (interposición de la lengua empujando los dientes), propulsión mandibular (movimientos de avance mandibular), hábitos posturales, u otros hábitos (cómo morderse las uñas, onicofagia, o cualquier otro objeto de forma repetitiva).

REFERENCIAS

Ustrell JM et al. Diagnóstico y tratamiento en ortodoncia. Barcelona: Elsevier; 2016.