Un gran reto para los odontólogos ha sido siempre la eliminación de las posibles manchas o tinciones de los dientes.
Entre las múltiples causas que dan lugar a estas manchas dentales se encuentran: traumatismos directos, infecciones crónicas dentales, desarrollo incompleto dental, consumo de tabaco o ciertos antibióticos como las tetraciclinas, colutorios dentales con clorhexidina, entre muchas otras.
Se pueden diferencias dos tipos de tinciones dentales. Por un lado, las pigmentaciones extrínsecas, que se localizan en la capa más superficial del diente, conocido como esmalte dental. Este tipo de tinciones son las producidas principalmente por el tabaco, como también, el café, el té, vino tinto etc.
Por otro lado, se encuentran las pigmentaciones intrínsecas, que afectan a capas dentales más profundas del diente, como la dentina. Este tipo de tinciones hace referencia a aquellas originadas por la toma de ciertos antibióticos o bien, traumatismos dentales, entre otros. Este segundo tipo de tinciones, las intrínsecas, resultan mucho más difíciles de eliminar y se requieren técnicas que van más allá de la microabrasión dental.
Una de las posibles alternativas de tratamiento, diseñada principalmente para eliminar los defectos de coloración limitadas en el esmalte (capa externa del diente), es la microabrasión dental.
Esta técnica se basa en la remoción de las capas superficiales del diente, para eliminar los defectos del esmalte producidas por: manchas causadas por un desarrollo incompleto del diente (hipoplasias o amelogénesis imperfecta), consumo de flúor (fluorosis), caries incipientes, manchas después de un tratamiento de ortodoncia etc.
La microabrasión dental logra la eliminación de alteraciones del color del diente que no superen los 2mm de profundidad.
Se fundamenta en una técnica químico-mecánica. Primero se aplica en los dientes ácido fosfórico y posteriormente una pasta abrasiva, que pule las capas del esmalte mediante la utilización de instrumentos rotatorios con punta de goma hasta lograr una uniformidad del color.
Finalmente, se puede aplicar alguna sesión de blanqueamiento dental para obtener unos dientes más blancos, estéticos y lograr una completa uniformidad del color. De manera que, estamos ante una técnica muy conservadora, de gran éxito y que garantiza un resultado muy estético.