La actual demanda estética ha hecho que terapias estéticas hayan aumentado, las cuales mejoran el aspecto de la sonrisa, pudiendo observar como los pacientes muestran un especial y mayor interés no por solo mejorar el aspecto funcional sino también el estético. Una de estas terapias son las carillas dentales.
Las carillas dentales son una fina capa que se fija en la superficie vestibular de los dientes anteriores, fundamentalmente para mejorar sus aspectos estéticos. Este tratamiento estético pueden ser, según el material, de resinas compuestas o de porcelana mayoritariamente.
¿Cómo se hacen las carillas de composite?
El primer paso e imprescindible para realizar las carillas de composite de tipo directo es hacer una historia clínica completa del paciente junto a un examen y unas fotografías clínicas para poder estudiar el caso. Una vez realizado todo esto, el siguiente paso es hacer impresiones las cuales se vacían y se obtiene el modelo. En este modelo se prepara un encerado diagnóstico, el cual da al odontólogo y al paciente una idea de forma final a los dientes y a la sonrisa, de modo que se previsualiza el resultado.
A continuación, se realiza una llave de silicona sobre el encerado diagnóstico. Esta llave se utiliza durante la realización de las carillas de composite para ver los márgenes, el grosor y también para modelar la carilla y tener una guía.
En la visita sucesiva se realiza la toma el color de los dientes, tras hacer una higiene profesional y un pulido para eliminar el posible cálculo presente o tinciones que puedan existir en la superficie dental. De este modo, se sabe a la perfección las tonalidades de los dientes y poder emplear la tonalidad de composite adecuada.
Después de tomar el color, se empieza la preparación de los dientes para las carillas de composite, la cual puede ser con tallado o simplemente con un pulido para igualar las superficies donde irán las carillas de composite. Para realizar las carillas de composite es importante hacer un buen aislamiento del campo para obtener una perfecta adhesión y un resultado exitoso.
La carilla de composite se procede con el grabado del diente mediante ácido ortofosfórico, un lavado y secado del diente y la aplicación de un adhesivo específico para las carillas de composite el cual garantiza una adhesión ideal. Para continuar, se procede a la inserción de la resina compuesta. Habitualmente se estratifica el material con distintas opacidades para proporcional el color perfecto del diente. Durante el modelado de la resina se va dando la forma anatómica correspondiente y polimerizando paso a paso. Al finalizar la última polimerización de las carillas de composite, se realiza el terminado, pulido y control de la carilla.