Para comprender bien el proceso de la caries dental es importante entender qué es exactamente una caries dental.
¿Qué es la caries dental?
La caries dental es una enfermedad infecciosa y multifactorial que se produce sobre los dientes y desmineraliza los diferentes tejidos que lo conforman, produciendo una lesión en forma de agujero.
¿Cómo se forman las caries dentales?
Entre los diferentes factores que producen la caries dental destaca la mala higiene oral. No solo afectando a aquellas personas que no cepillan sus dientes, sino también a todos aquellos que realizan una mala técnica de cepillado. Un mal cepillado dental permite que los restos de alimentos y de placa bacteriana permanezcan sobre los dientes y comience el proceso de desmineralización que desencadena la formación de la caries dental.
¿Cómo evitar la caries dental?
Para evitar la caries dental además de mantener una buena higiene oral con el cepillado dental, se pueden añadir medios auxiliares de limpieza como el uso del hilo dental y/o los enjuagues bucales.
El uso del hilo dental es muy importante, la placa bacteriana que se aloja entre los dientes, justamente en el punto de contacto interdental, solo podrá ser retirada con el hilo, ya que las cerdas del cepillo no son capaces de acceder a este punto. Así pues, tras un buen cepillado de los dientes el uso del hilo interdental permitirá asegurar el control de la caries.
Es importante evitar ingerir alimentos o dulces entre comidas, ya que cada vez que consumimos alimentos se modifica el pH de la boca y los dientes se hacen más susceptibles a la formación de caries por un periodo aproximado de media hora.
Acudir analmente al odontólogo permitirá la prevención y también el control de las caries desde fases muy tempranas.
Fases de la caries dental
En una primera fase, solo se aprecian unas pequeñas manchas o surcos negros en el diente, cuando estas manchas ya han perforado el esmalte, se recomienda su tratamiento. Cuanto antes se traten las caries superficiales será mejor, ya que se evitará que la caries evolucione haciéndose más grande y afectando tejidos más profundos que pongan en riesgo la estabilidad del diente en boca.
A medida que la caries penetra a los tejidos más profundos se acerca más al nervio dental y comienza a generar dolor. Puede simplemente doler al comer o puede doler con los cambios térmicos frio o calor.
Si el caso no es tratado a tiempo con una endodoncia o tratamiento del nervio, puede generar dolores intensos, inflamación adyacente al diente o incluso inflamación extraoral.
Cuando la caries dental está muy avanzada y ha destruido gran parte del tejido dental, cabe la posibilidad de que el diente no sea restaurable y por ende requiera ser extraído y sustituido por un implante dental.
¿Cómo detectar la caries dental?
Lo ideal es asistir periódicamente al odontólogo para que este pueda detectar la caries en sus estadios más tempranos y antes de que aparezca el dolor.
En la mayoría de los casos las caries dentales pueden ser detectadas visualmente mediante la observación de alguna pigmentación o mancha negra en el diente.
Cuando el proceso carioso ya está más avanzada uno de los síntomas más evidentes para detectar la caries dental, es la sensibilidad extrema al frio o calor, o dolor al comer algún alimento edulcorado.
Si la persona observa o siente alguno de estos signos o síntomas debe acudir de inmediato a su odontólogo tratante para que realice el diagnóstico e indique el tratamiento necesario para el caso.
Tratamiento de la caries dental
Si la caries es superficial, debe ser eliminada y será tratada con una reconstrucción de composite.
Si la caries ya ha entrado en contacto con el nervio dental, debe ser eliminada y el nervio debe ser tratado mediante una endodoncia o tratamiento de los conductos radiculares. En este caso debido a la gran pérdida de estructura dental se recomienda restaurar y además proteger con una incrustación de composite o de porcelana o en los casos más severos, el diente será rehabilitado con una corona dental.
Cuanto antes se trate la caries dental, mejor será el pronóstico para el diente afectado.