Tratamiento de la gingivitis, causas, cuidados y síntomas

En la mayoría de las personas, a los 10 o 20 días de la acumulación de placa, se establecen los signos clínicos de gingivitis aunque esto varía mucho. La gingivitis se presenta como un enrojecimiento gingival, edema y una tendencia aumentada con sangrado del tejido blando al sondaje. En estos estadio los signos clínicos todavía son reversibles una vez eliminada la placa bacteriana mediante medidas de control eficaces.

Por lo que la gingivitis puede definirse como un proceso inflamatorio de la encía, sin destrucción de los tejidos de soporte del diente. Se produce por la acumulación inespecífica de placa bacteriana y se elimina mediante un buen control de la misma. El síntoma típico es el sangrado de las encías.

Existen dos tipos de gingivitis, la aguda y la crónica. La crónica si no es tratada puede terminar en una forma de periodontitis, por lo que en la periodontitis hay un pérdida de inserción ósea, en cambio en la gingivitis no. 

La presencia de placa bacteriana a nivel supragingival y subgingival se un fenómeno constante, sin embargo es posible el mantenimiento sano de la encía y del periodonto para evitar todo tipo de patología oral.

Causas de la gingivitis

La gingivitis es una enfermedad periodontal caracterizada por una inflamación en las encías. Es la etapa inicial de la enfermedad de las encías y la más fácil de tratar. 

La causa directa de la gingivitis es la placa: una película suave, pegajosa y sin color formada por bacterias que se deposita constantemente sobre los dientes y encías. 

La gingivitis inducida por placa bacteriana de forma por la  acumulación de placa en el margen gingival y hay sangrado al sondaje sin pérdida de inserción. 


Las que son no o inducidas por placa bacteriana se forman si el cepillado y el uso diario del hilo dental no eliminan la placa, la misma produce toxinas (venenos) que irritan el tejido gingival produciendo dolor y causando gingivitis. En esta primera etapa de la enfermedad, el daño puede revertirse, ya que el hueso y el tejido conectivo que sostienen los dientes en su lugar no han sido afectados (no sobrepasa la línea mucogingival). Sin embargo si se deja sin tratamiento, la gingivitis puede transformarse en periodontitis y provocar daños permanentes en los dientes y mandíbula. Por ejemplo, pacientes con un eritema lineal sufren dolor al cepillado, por lo que se les acumula placa y desarrollan los dos tipos de gingivitis. 


El tratamientos y los cuidados ante una gingivitis

El tratamiento periodontal se realiza por fases. Así, para tratar la gingivitis debemos seguir los siguientes puntos: 

  • Control de los factores causantes de la enfermedad periodontal. 
  • Tratamiento de la gingivitis por parte del profesional: control de placa y profilaxis. 
  • Motivación y enseñanza de higiene oral al paciente. 

El control de la placa bacteriana supone prácticamente el control de la enfermedad gingival, ya que sin las bacterias de la placa dental no existe la enfermedad.

La prevención se puede llevar a cabo en cualquier momento de la enfermedad, ya sea evitar su inicio (sobre todo en cuanto a la destrucción del soporte periodontal), una vez iniciada conservar el novato de apoyo suficiente para conservar la estética y la función y en los pacientes que ya han sido tratados, mantener el apoyo periodontal restante.

Existen dos tipos de métodos diferentes para intentar controlar la placa: los métodos mecánicos y los métodos químicos.

Los métodos mecánicos consisten en combinar tanto medidas de higiene oral personal (placa supragingival) como profesional (placa subgingival). El propósito de la limpieza mecánica es eliminar regularmente microorganismos para no migren subgingivalmente y que no induzca inflamación gingival. Para la eliminación de la placa supragingival el mejor método es el mecánico mediante la utilización del cepillo dental, además es la que más se utiliza en la población mundial.

El cepillado dental normal es únicamente eficiente en las caras vestibular y lingual  o palatina, pero los efectos miedo interproximal serán limitados. Por se debe utilizar el hilo de seda dental o los cepillos interproximales que serán muy eficientes si se utilizan correctamente. 

Mediante el cepillado dental se puede eliminar hasta 1 milímetro de placa subgingival. Un cepillado efectivo se puede conseguir con la técnica de Bass, la técnica de Stillman o la técnica de Charter. Con la técnica de Bass se debe posicionar el cabezal del cepillo en dirección oblicua al ápice, con el fin de introducir las cerdas en el surco gingival, entonces proceder a un movimiento rotatorio corto en dirección antero posterior. Con la técnica de Stillman de debe posicionar la cabeza del cepillo en dirección oblicua Hacia el ápice. Posteriormente proceder a generar un pequeño movimiento vibratorio y giratorio hacia oclusal. Se trata de una técnica muy útil para recesión gingivales. Finalmente con la técnica de Charter se debe posicionar el cabezal del cepillo en dirección oblicua a la superficie dentaria, con las cerdas en dirección oclusal y mover el cepillo de atrás hacia delante con un movimiento de rotación.

Con los reveladoras de placa se muestra al paciente el principal factor etiológico de la enfermedad gingival, la placa bacteriana. La placa adherida a la superficie dental y la encía se tiñe selectivamente con los reveladores y el paciente puede observar de forma fácil donde hay placa dental y también mostrar la posible eliminación de la placa mediante el cepillado.

Mediante el revelador se pueden establecer unos índices de placa para poder tener un control de la cantidad de placa bacteriana que existe en boca, así como realizar un estudio individual de los pacientes en la clínica odontológica. 

Los métodos químicos son todos aquellos agentes químicos que forman parte de los colutorios y que ayudan a que la placa no prolifere tanto, como las pastas dentífricas y los colutorios. 

La clorhexidina es un agente químico que a concentraciones de 0,10% o superiores en colutorios, es un potente agente antiplaca. Los colutorios de fluoruro de estaño y fluoruro de aminas que son reductores de placa, además combinados con una buena higiene oral personal pueden controlar la gingivitis.

Por lo que la higiene oral del paciente es un pilar fundamental del tratamiento de la enfermedad gingival, y es imprescindible para poder mantener un buen estado gingival y periodontal. 

REFERENCIAS

  • Newman MG, Takei H, Klokkevold PR, Carranza F. Periodontología Clínica de Carranza. 11a ed. Venezuela: Amolca; c2014.
  • Cuenca Sala E, Baca García P. Odontología preventiva y comunitaria. Principios, métodos y aplicaciones. 4a ed. Barcelona: Elsevier Masson; 2013.