La pérdida de la estructura dental por el proceso de la caries, ha sido un inconveniente que sufre la humanidad desde épocas remotas. Con el paso de los años se fueron desarrollando técnicas que permitían la reposición de los dientes perdidos o la restitución de la estructura dental destruida por grandes caries.
Inicialmente los dientes eran cubiertos con diferentes tipos de metales. Para algunas culturas el uso de metales preciosos sobre sus dientes era un signo de riqueza y de superioridad. Estas costumbres fueron mermando y se comenzó a buscar un material que pudiera imitar de la forma más natural al diente.
Tras diferentes tipos de restauraciones, las coronas protésicas se convirtieron en el tratamiento dental de elección para rehabilitar estos dientes dañados. Por mucho tiempo se utilizaron coronas protésicas confeccionadas con metal – porcelana, de hecho aún se siguen utilizando en algunos casos. Sin embargo las exigencias estéticas en la actualidad, obligaron a los científicos y a los clínicos a desarrollar materiales que incluyeran los beneficios funcionales y de resistencia del metal, pero que a su vez, aportaran un mayor grado de estética a las coronas dentales.
Tras varias pruebas se comenzó a utilizar el zirconio. Este material es tan resistente como el metal, y ha demostrado que funciona perfectamente cuando forma parte de los elementos que conforman una prótesis dental.
Coronas dentales de zirconio – porcelana
Las coronas de zirconio ofrecen una combinación de alta resistencia con una buena estética.
Este tipo de coronas compuestas por zirconio con porcelana suelen ser el tratamiento de elección cuando es necesario colocar una corona en una zona que recibe muchas cargas, pero que al mismo tiempo requiere de un resultado estético.
Coronas de circonio Vs. Coronas de metal
Hoy en día no se justifica el uso de metales oscuros debajo de las porcelanas, ya que afean el resultado estético, dejando ver un diente grisáceo con un borde negruzco en la zona adyacente a la encía, que con el paso de los años, se va haciendo más evidente por la migración natural de esta encía en dirección contraria al diente.
El uso del metal en la actualidad solo se justifica en las prótesis sobre implantes, ya que utilizando este material se logra un ajuste superior al momento de unir la corona sobre implante al propio implante de zirconio. La tecnología actual permite llevar a cabo técnicas para el desarrollo de este tipo de coronas, que impiden la exposición del metal como ocurre en las coronas que se realizan sobre dientes naturales.
Es importante que el profesional que realice un trabajo de rehabilitación protésica este actualizado y cuente con los conocimientos necesarios para llevar a cabo el tratamiento con la última tecnología, materiales y técnicas disponibles.
La instalación de coronas de metal porcelana en el sector anterior es totalmente obsoleta y colocar este tipo de restauración en la boca de un paciente en la actualidad, se puede considerar un mal tratamiento.
Es posible que en países en donde no existen los medios adecuados o no se emplea la última tecnología esto ocurra y no debe ser juzgado. Sin embargo realizar este tipo de tratamientos en países desarrollados que están a la vanguardia de la tecnología en el área de los materiales dentales, no tiene ninguna justificación y solo resulta en un daño para el paciente, quien terminará viéndose en la necesidad de repetir el tratamiento, gastando más dinero y desgastando más su diente de forma innecesaria.
¿Cuándo se recomienda el uso de coronas de zirconio?
Las prótesis de zirconio se recomiendan cuando es necesario utilizar un material de muy alta resistencia.
Se puede utilizar en puentes de coronas fijas del sector posterior, en donde las cargas ejercidas por la masticación harán constante presión.
Diferencia entre coronas de zirconio y coronas estéticas de porcelana
Actualmente existen materiales de porcelana cuyo módulo de elasticidad imita muy bien al módulo de elasticidad del diente natural, por lo que se adaptan perfectamente a las fuerzas recibidas durante la masticación en la mayoría de los casos.
Cuando elegir una corona de zirconio o una corona total porcelana será una decisión que debe tomar el especialista que esté llevando a cabo la rehabilitación. Esto dependerá del origen del desgaste, del tipo de paciente, de la mordida del mismo y de la presencia de hábitos patológicos tales como el bruxismo, que puedan hacer necesario el uso de materiales con características muy específicas, para lograr el éxito del tratamiento a largo plazo.
La elección del material que se utiliza en cada caso no debe realizarse a la ligera. Tampoco se puede usar un material estándar para todos los casos, ya que cada situación y cada paciente son diferentes y tienen requerimientos diferentes. Es aquí donde la formación y los conocimientos del especialista que realiza el tratamiento tienen un papel fundamental para lograr un resultado que sea exitoso a largo plazo.