La pérdida dental puede suponer un problema en la boca ya que la función masticatoria se ve afectada. En muchos de estos casos, se opta para colocar implantes dentales para restituir la función bucodental.
Los implantes dentales son estructuras hechas de titanio que tienen una semejante a la raíz de un diente natural. Se colocan de forma quirúrgica en los huesos maxilares, restituyendo el diente perdido con la colocación posterior de una corona sobre el implante.
El tratamiento implantológico es una opción terapéutica segura que cursa sin dolor postoperatorio si se siguen las instrucciones postoperatorias dadas por el especialista junto con la medicación apropiada en cada caso. La colocación de ellos se realiza utilizando técnicas mínimamente invasivas y bajo anestesia local. Después de su colocación, en ocasiones puntuales el postoperatorio puede cursar con molestias para el paciente.
Es por esta razón, que a continuación se explican las causas más frecuentes por las que puede surgir un dolor después de la colocación de los implantes dentales.
¿Cuáles son las causas de dolor postoperatorio de los implantes dentales?
Tras la intervención quirúrgica de la colocación de implantes dentales es normal sentir alguna molestia y/o inflamación en la zona tratada pero sin dolores graves. Estos efectos suelen remitir en una semana aproximadamente.
Cada caso y cada paciente se tratan de forma personalizada y el postoperatorio de cada caso puede variar. Por esto, en algunas ocasiones el postoperatorio de la colocación de implantes dentales puede cursar con dolores.
Los factores que pueden influir en la percepción del dolor en implantología se relacionan con la complejidad del caso, la experiencia del profesional y la información que posee el paciente sobre la intervención quirúrgica.
El postoperatorio de la intervenciones implantológicas varía según el número de implantes colocados, si la intervención se ha realizado con extracción dental, si se ha colocado algún tipo de prótesis provisional, el lugar donde se han colocado los implantes, mandíbula o maxilar superior y la técnica utilizada para la colocación. Es lógico pensar que si la intervención es más traumática, se producirá más dolor e inflamación.
El dolor puede aparecer si hay complicaciones postoperatorias. Pueden aparecer hematomas en el área quirúrgica, la parestesia puede aparecer por un trauma quirúrgico sobre el nervio mentoniano o por una afectación del nervio dentario inferior. Pueden aparecer úlceras en la zona por una excesiva presión en la zona de los implantes, las neuralgias pueden aparecer en cualquiera de los pares craneales que recorren el territorio maxilofacial. En la zona puede aparecer una inflamación que cause con doloración, aunque estas suelen resolverse con tratamiento antibiótico. Si las prótesis sobre los implantes no se realizan de una forma efectiva, pueden aparecer disfunciones en la articulación temporomandibular.
Una de las causas principales del dolor en implantología es la osteítis periimplantaria (se trata de una inflamación del hueso por la pérdida ósea progresiva alrededor del implante). Puede expresarse con un dolor leve o moderado, local, referido o irradiado, o como una neuralgia facial de tipo atípico.
Para evitar posibles dolores postoperatorios es imprescindible seguir las pautas postoperatorias indicadas por el especialista en implantología dental. Es de especial importancia mantener una buena higienización de la zona tratada para mantenerla lo máximo posible limpia. En cualquier caso, no dude en acudir a la clínica dental para resolver sus dudas.
