Manifestaciones bucales durante el embarazo
Durante el embarazo, la mayoría de las mujeres nota que sus encías están más sensibles y que sangran con facilidad. Para evitar futuros problemas bucales, es necesario una atención especial de los dientes y encías.
Los cambios hormonales que se produce durante el periodo de gestación condicionan cambios en todo el organismo y en especial en la salud de nuestra boca. Es muy probable que sangren en las encías, más conocido como gingivitis. Este tipo de trastorno es más frecuente a partir del tercer mes de embarazo.
Durante el segundo trimestre también puede aparecer un “granuloma del embarazo”. Es una lesión abultada localizada en la encía y que sangra con facilidad. La mayoría disminuyen de tamaño o desaparecen tras el parto.
Además, durante en los nueve meses de embarazo suele haber un aumento en el consumo de azúcar, aparición de náuseas y vómitos o cambios en la composición de la saliva (se tiene un PH más ácido), que pueden causar trastornos en las encías y caries.
De manera que es fundamental para prevenir problemas bucales llevar a cabo una buena higiene bucodental y una alimentación equilibrada, ambas medidas son imprescindibles.
Medidas preventivas
- Correcta higiene bucodental. Es necesario limpiarse los dientes después de cada comida con un cepillo de cerdas suaves para no irritar las encías, dentífricos adecuados y sobretodo limpiar la lengua. Se aconseja completar la limpieza con hilo dental; su uso de manera regular ayuda a disminuir el sangrado de las encías y prevenir la gingivitis.
- Dieta saludable y equilibrada. Comer sano es vital tanto para la salud de la madre como también para la del bebé. Es básico para la formación de los huesos y dientes del bebé que la madre ingiera vitaminas A y D y minerales como el calcio y fósforo.
- Evitar el consumo de azúcar en la medida de lo posible. Su alto consumo hace que la placa dental (bacterias y suciedad) sea más agresiva y produce ácidos que atacan a los dientes provocando caries.
- Acudir a revisiones al dentista para evaluar y analizar si tenemos algún problema en nuestras encías y dientes. Hay que estar en alerta si las encías están inflamadas o sensibles, si sangran o si se tiene la impresión de que los dientes se mueven, esto puede ser síntoma de padecer algún problema periodontal. En este caso, se debe acudir inmediatamente al dentista porque estas enfermedades pueden presentar un mayor riesgo de nacimientos prematuros.
Tratamientos dentales ¿sí o no?
Antes de realizar cualquier tratamiento odontológico durante el embarazo, es necesario contar con la aprobación del ginecólogo para evitar algún problema.
Se deben evitar en el primer trimestre, ya que durante este periodo se produce la formación de los órganos del bebé. En este primer trimestre tampoco es recomendado hacerse radiografías.
Durante el último trimestre del embarazo, el sentarse por largos períodos de tiempo en el sillón odontológico puede llegar a ser incómodo y hay evidencia de que las mujeres embarazadas pueden ser más propensas a cansarse.
De manera que, lo ideal es que cualquier tratamiento dental se realice antes del embarazo, pero si esto no es posible, la época que se recomienda es el segundo trimestre de gestación (cuarto y sexto mes).
Visitas al dentista
Se recomienda visitar periódicamente al dentista, al menos una vez durante el embarazo, para prevenir posibles problemas en la salud bucodental y recibir orientación de los tratamientos más oportunos y detectar posibles alteraciones.
Tras el parto, es imprescindible acudir al odontólogo para que realice una revisión y evalúe el estado de la boca.