Efectos del azúcar sobre los dientes, métodos preventivos

La nutrición es un conjunto de funciones que permiten la incorporación de materiales en las células para obtener agua y sustancias necesarias para su mantenimiento y renovación. 

Para poder obtener estos beneficios son injeridos alimentos. Los alimentos y la dieta adecuados para poder cumplir todas las características necesarias son el consumo de hidratos de carbono (como pan, corales, arroz…), el alto consumo de verdura y fruta (es importante consumir un mínimo de 5 raciones al día de ellas) y la ingesta de más pescado que de carne. En función del gasto energético de cada persona pueden variar las proporciones.

La nutrición y la dieta tienen una relación muy estrecha con la salud oral. Los efectos de tipo local que tienen la dieta sobre el metabolismo de la placa y sobre el pH intraoral son de mucha más importancia en la salud oral que los efectos sistémicos o nutricionales. La nutrición influye más en la etapa de formación de los dientes en el esmalte preeruptiva. Además, la existencia de alguna deficiencia, como la de vitamina D y A, junto con una malnutrición pueden tener una fuerte relación con hipoplasias del esmalte y una atrofia de las glándulas salivales. 

La dieta se ve condicionada por varios factores psicosociales del huésped, y es el mayor factor de riesgo en la determinación de la caries dental. Además de jugar un papel muy importante en la salud general y las condiciones médicas pueden afectar y alterar la dieta.  

Los efectos del azúcar sobre los dientes

Se sabe que los hidratos de carbono absorción rápida (los azúcares) están estrechamente relacionados con un elevado riesgo de caries dental. En ausencia de medidas preventivas, la prevalencia de la caries dental está directamente relacionada con el consumo de azúcar de la población que se estudia. Cuando se aumenta el consumo de azúcar, el riesgo de caries también aumenta.

Los hidratos de carbono en la dieta son el sustrato energético de los microorganismos bacterianos y pueden ser fermentados fácilmente como glucosa o fructosa. Se sabe también que la combinación de almidón y sacarosa es potencialmente más cariogénicos que los azúcares por si solos.

Los azúcares consumidos entre las comidas principales, sobretodo si son blandos o están disueltos en bebidas refrescantes, son mucho más cariogénicos que los consumidos durante las comidas principales. Además, durante la hora de la comida principal el flujo de saliva es más elevado y, por lo tanto existe una mayor capacidad neutralizadora.

¿Cómo se puede evaluar el azúcar y el poder cariogénico de la dieta?

Para poder evaluar el consumo individual del azúcar se puede realizar mediante varios métodos. El recordatorio de 24 horas es un tipo de análisis mediante el cual se pide al sujeto que recuerde todos los alimentos y bebidas injeridas durante el día. En el diario dietético se solicita al paciente anotar todos los alimentos y bebidas que ingiere cada día. Otro método es realizar un cuestionarios de frecuencia que consiste en una lista cerrada de alimentos mediante los cuales se solicita la frecuencia del consumo de cada uno de estos alimentos. Finalmente la historia dietética se basa en una entrevista con el propósito de obtener una información sobre los hábitos alimentarios actuales y pasados. 

También, mediante estos registros se puede analizar la cantidad de azúcar que se consume, la consistencia de los alimentos ya que los más perjudiciales son los que se enganchan. La frecuencia del consumo y el consumo entre comidas es uno de los factores importantes a evaluar. Finalmente se tiene que tener en cuenta los factores protectores, es decir algunos alimentos que tienen propiedades anticariogénicas.

Recomendaciones para prevenir la caries dental y los efectos del azúcar sobre los dientes

Se recomienda reducir el consumo de azúcar, esta reducción debe ser inferior a 50 gramos de azúcar al día. También se debe disminuir la frecuencia de esta consumo junto con la reducción de sustancias dulces y que se enganchen. Se debe eliminar el hábito de picar entre comidas principales y la sustitución del azúcar por edulcorantes no cariogénicos. 

Es importante que se consuma con abundancia fruta y verdura, es la clave para una alimentación sana. Se recomienda consumir más pescado que carne y disminuir el consumo de sal. Además, es fundamental eliminar el consumo de grasas saturadas, azúcar, y todos los productos procesados. Finalmente, realizar una ingesta diaria de cómo mínimo 2 litros de agua.

Para poder prevenir los efectos que tiene el azúcar sobre los dientes, aparte de controlar la alimentación, su frecuencia y cantidad, es de gran importancia realizar una buena higiene bucodental después de cada comida. La técnica de cepillado puede influir en la formación de patología bucodental, por lo que se recomienda consultar con el odontólogo de confianza para analizar la técnica de cepillado y la higiene bucodental para poder mejorar y conseguir obtener una buena salud bucodental.

REFERENCIAS

  • Cuenca Sala E, Baca García P. Odontología preventiva y comunitaria. Principios, métodos y aplicaciones. 4a ed. Barcelona: Elsevier Masson; 2013.
  • Moynihan P, Petersen PE. Diet, nutrition and the prevention of dental diseases. Public Health Nutrition 2004; 7: 201-26.
  • Hara AT, Zero DT. The caries environment: saliva, pellicle, diet and hard tissue ultrastructure. Dent Clin N Am 2010; 54: 455-67.