La oclusión se define como la relación establecida entre la arcada superior y la inferior, en la que se toma como referencia la interdigitación entre los dientes de ambas arcadas (superior e inferior).
Esta relación dental puede ser clasificada en tres sentidos del espacio: transversal, sagital y vertical.
El sentido transversal, es decir de izquierda a derecha o al revés, es el más importante y el primero que tiene que tratarse ya que según este sentido la mandíbula, la cual dirige el crecimiento, puede influir sobre el maxilar superior. En este espacio en el sector anterior se deben observan las deviaciones de la línea media y en los sectores posteriores la normalidad relacionada con la oclusión de las cúspides vestibulares superiores por fuera de las cúspides vestibulares inferiores, de los dos lados simétricamente, pudiendo tener mordidas cruzadas posteriores.
El sentido sagital es el siguiente plano de importancia después del transversal. Este sentido se basa en la relación de delante a detrás. En el sector anterior en este plano se pueden distinguir el overjet o resalte: positivo o aumentado (cuando los dientes superiores están por delante de los inferiores en más de 3 milímetros), cero o borde a borde (si los bordes incisales de los incisivos superiores e inferiores están en la misma altura) y negativo o mordida cruzada anterior (si los incisivos superiores están detrás de los inferiores). En los sectores posteriores las maloclusiones se clasifican, según la clasificación de Angle, en clase I, clase II y clase III.
El último sentido es el sentido vertical, que es la relación de los dientes de arriba abajo. En este sentido del espacio los dientes anteriores pueden presentar mordida abierta (si hay una falta de contacto vertical entre los incisivos, aunque también puede darse en sectores laterales o posteriores, llamándose mordida abierta lateral o posterior), mordida borde a borde (cuando el solapamiento es nulo) o sobremordida o overbite aumentado (si solapamiento del borde incisal de los incisivos superiores sobrepasa los 3 milímetros al borde incisal inferior).
Cómo se define este tipo de mordida
La mordida borde a borde es definida como un tipo de maloclusión en sentido vertical y sagital en la cual el overjet y el overbite son cero. Es decir, los incisivos superiores y los inferiores contactan en su porción incisal.
La etiología de la mordida borde a borde puede ser dental o esquelética. El desencadenante de origen esquelético se encuentra en un problema de displasia del hueso, en que existe una hipoplasia del maxilar o una hipertrofia de la mandíbula. El origen dental de la mordida borde a borde se debe a una inclinación axial anormal de los incisivos.
Para el tratamiento de la mordida borde a borde, es importante realizar un buen diagnóstico para saber la base de la maloclusión y poder distinguir y realizar un plan de tratamiento adecuado en cada caso. De modo que si es la base esquelética, el tratamiento se efectúa con aparatos interceptivos en edad de crecimiento o con cirugía ortognática, en edades adultos, si la maloclusión es mas severa. Los casos de mordida borde a borde de origen dental son más fáciles de solucionar, mediante aparatología de movimiento dental. Estos aparatos puede ser utilizada también para disimular una clase esquelética.