La queilitis angular es una lesión inflamatoria en la comisura labial, que puede ser unilateral o bilateral. Cuando hablamos de queilitis angular, conocidas coloquialmente como boqueras, nos referimos a fisuras o grietas dispuestas en las comisuras labiales.
Son dolorosas, de evolución crónica con brotes de agudización. Aparecen cubiertas por una pseudomembrana blanquecina o amarillenta. En casos graves, las fisuras pueden sangrar cuando se abre la boca, y formar úlceras poco profundas o una costra.
La etiopatogenia es muy variada y en muchos casos hay muchos factores causales que se encuentran asociados. Podemos reconocer factores de causa local como puede ser la disminución de la dimensión vertical de la cara en aquellas personas que han perdido muchos dientes o son portadores de prótesis mal adaptadas.
También pueden estar relacionadas con la edad avanzada y aparición de arrugas en la zona comisural, facilitándose el acúmulo de saliva y la colonización en estos pliegues de patógenos oportunistas como los hongos, cándida albicans y staphylococcus aureus.
Entre las causas o factores generales podemos encontrar los pacientes diabéticos, enfermos con déficits nutricionales como la anemia ferropénica o vitamínicos (B12) y aquellos que presentan infección por VIH. Es importante la valoración de estas lesiones actualmente en personas jóvenes que presentan queilitis angular crónica o con frecuente presentación, ya que podrían indicar una cierta alteración del estado inmunitario.
También se ha relacionado con deficiencias nutricionales, que puede ser evidencia de la mala alimentación o la malnutrición. La deficiencia de zinc también se ha asociado con queilitis angular.
Los casos menos graves se producen cuando hace mucho frío (por ejemplo, en invierno), y es ampliamente conocida por tener los labios agrietados. Los niños pueden lamer sus labios para intentar aliviar el dolor de manera temporal, pero este hecho empeora la lesión.
Clínica y diagnóstico
En la quelitis angular, puede aparecer dolor al realizar movimientos con los labios como hablar, bostezar o comer. El diagnóstico se va a realizar por la clínica y el análisis bacteriológico de las lesiones.
Tratamiento de la quelitis angular
El tratamiento de la queilitis angular varía dependiendo de la causa. El tratamiento va dirigido fundamentalmente a los factores generales y locales desencadenantes o perpetuadores de las lesiones.
Para los casos leves producidos por una infección bacteriana, es recomendable la aplicación de una crema antiséptica tópica en la zona durante varios días para tratar la infección y curar las lesiones. Pueden ser útiles las pomadas tópicas de antibiótico y/o antifúngicos (nistatina, miconazol, ketoconazol).
Por otro lado, los casos más graves de la infección pueden requerir la intervención de un odontólogo.
Algunos casos son causados por el síndrome de malnutrición o anemias. Esto es mejorado por inyecciones de vitamina B-12. La dosis indicada y la frecuencia de las inyecciones se determina por la gravedad de las lesiones y la curación es a los pocos días.