Las alteraciones que pueden haber en la cavidad oral son abundantes y variables. En los tejidos blandos las patologías son de importancia y estos tejidos tienen que explorarse para poder descartar alguna alteración en ellos, como en la lengua.
La glositis es la inflamación de la lengua. Esta inflamación provoca una hinchazón de la lengua, un aumento de su tamaño, un enrojecimiento de ella y una depapilación (la eliminación local de las papilas dentarias).
La glositis puede clasificarse en:
- Aguda (cuando de produce de forma puntual y durante poco tiempo)
- Crónica (cuando la inflamación persiste)
- Idiopática (si la cauda es desconocida)
- Atrófica (cuando hay una pérdida de las papilas ya que se atrofian)
- Glositis migratoria benigna, también conocida como lengua geográfica (cuando la glositis varía de lugar, provocando una depapilación)
- Glositis de Hunter (está causada por la anemia perniciosa)
- Glositis romboidal media (cuando hay una mancha eritematosa, lisa y brillante al centro de la lengua con ausencia de papilas)
¿Cuáles son las causas de la glositis?
Las principales causas de la inflamación de la lengua son por sustancias irritantes, por una infección, por traumatismos o irritación mecánica, por enfermedades o deficiencias vitamínicas.
- Las sustancias irritantes que pueden causar glositis pueden ser el alcohol, el tabaco y los alimentos que estén muy calientes.
- Las infecciones bacterianas, víricas o fúngicas, como la cándida albicans, son las responsables de ocasionar una glositis.
- Dentro de la irritación mecánica se encuentran los dientes que estén afilados, las quemadura y la aparatología dental que no se haya pulido previamente.
- Una reacción alérgica puede ser también la etiología de la glositis
- Las enfermedades como el liquen plano, las úlceras, la celiaquía, la psoriasis o el reflujo gastroesofágico.
- Las carencias de vitamina B (vitamina B12) y deficiencias de hierro.
- El síndrome de Plummer-Vinson, provoca anomalías en las uñas, disfagia y una anemia (por deficiencia de hierro).
- Boca seca, como la destrucción de las glándulas salivales causada por el síndrome de Sjögren.
- La glositis puede tener un factor hereditario, afectando a varios individuos de la misma familia.
¿Qué síntomas puede ocasionar la glositis?
La glositis puede tratarse de una inflamación de tipo asintomático, es decir que no cause dolor, o por lo contrario que provoque molestias en la lengua y en la cavidad oral.
Los síntomas de la glositis son variables entre diferentes personas, es decir cada persona puede experimentar síntomas muy diferentes.
Los signos y síntomas más frecuentes de la glositis son:
- Ardor de boca
- Úlceras
- Dolor en la lengua
- Eritema de la lengua (enrojecimiento)
- Hinchazón de la lengua
- Sensación de sabor amargo
- Depapilación, la lengua se pone lisa, sin papilas
- Pérdida del gusto
Los tratamientos para la glositis
Para poder tratar adecuadamente la glositis, es muy importante hacer un diagnóstico antes.
Muchas veces son necesarias pruebas complementarias como un hemograma completo para poder descartar patologías sistémicas como la anemia o la carencia de vitaminas o de hierro.
Además, es muy importante realizar una muy buena higiene bucodental para disminuir la población microbiana de la zona.
El tratamiento principal de la glositis es tratar la etiología principal de ella. Una vez realizado dicho tratamiento, se intenta disminuir la inflamación de la lengua.
Para reducir la inflamación de la lengua y que los síntomas puedan disminuir, puede ser útil prescribir enjuagues bucales con anestésicos (como la lidocaína), para disminuir el dolor; enjuagues bucales con antihistamínicos; fármacos antimicrobianos, para el tratamiento de las infecciones, y fármacos antiinflamatorios para disminuir la inflamación.