Un puente dental es un tipo de prótesis dental fija la cual se utiliza con el fin de sustituir dientes que el paciente haya perdido. Es una alternativa cuando hay que reponer piezas dentales ausentes o con pronóstico de extracción. Hoy en día existen diferentes tipos de puentes fijos que ayudarán al paciente a recobrar la funcionalidad de las piezas a extraer o ausentes y devolver la estética.
La confección de un puente dental, normalmente se lleva a cabo sobre los dientes remanentes y está fabricado de metal porcelana por lo general, el metal será el núcleo de la estructura, este metal del que hablamos en ocasiones puede ser una mezcla de aleaciones de diversos metales, así el puente está dotado de una rigidez capaz de soportar las distintas fuerzas que se producen en la cavidad bucal, mientras que la porcelana quedará al exterior aportando la estética de dicho puente.
Este tipo de confección de metal-porcelana es la más usual aunque existen puentes confeccionados de porcelana en su totalidad ya que en la actualidad se ha evolucionado mucho en cuanto a la investigación de materiales llegando a conseguir tipos de porcelana que aportan tanta o similar dureza a la del metal, aunque este segundo tipo de puentes realizados totalmente en porcelana están más indicados para zonas anteriores de la cavidad oral puesto que aportan más estética, la similitud con los dientes naturales será perfecta.
La durabilidad de los puentes fijo en boca en condiciones óptimas de uso y de higiene oral, es muy alta, se puede decir que duran alrededor de 20 a 30 años. Si el paciente no presenta una adecuada higiene oral se pueden presentar complicaciones o incluso patologías como la periodontitis. Pero será el odontólogo quien proponga la mejor alternativa para sustituir dientes ausentes.
Las causas más habituales para ser portador de un puente fijo:
- Sustitución de espacios o dientes ausentes
- Mantener el aspecto facial.
- Evitar alteraciones en cuanto a oclusión de los dientes que quedan (que no invadan el espacio)
- Devolver las capacidades funcionales de: masticación y fonación.
- Restauración de la sonrisa.
Es una opción que aporta mucha más comodidad, estabilidad y estética comparándolo con una prótesis removible.
Por lo general para su realización se requiere aproximadamente dos visitas, en las que: en la primera visita normalmente el odontólogo establece el plan de tratamiento en caso de ser el puente fijo se procede a la toma de registros para que se pueda realizar el diseño y la fabricación de un puente provisional, mientras laboratorio trabajara en el puente definitivo.
En una segunda visita mediante anestesia local del área donde colocaremos el puente, se preparan los dientes que servirán como pilares de la estructura realizando un tallado de estos, en esta visita tomaremos el color de la porcelana que laboratorio vaya a trabajar pidiendo que el paciente opine sobre el color decidido.
En una tercera y última visita el odontólogo retira el puente provisional y pasará a probar el puente definitivo si el ajuste y la oclusión (encaje de los dientes) y al paciente le gusta, se procederá a la cementación de dicho puente.
La realización de una prótesis fija es el mejor tratamiento para llegar a restablecer la ausencia dental. No se puede a comparar con la incomodas prótesis removibles estas prótesis fijas pueden ir sobre la estructura dental remanente de dientes propios o también se pueden llevar a cabo sobre implantes. En Estudi Dental Barcelona ofrecemos todas las opciones después de estudiar el caso, podemos asesorar sobre la mejor opción, en cuanto a tipo y material de puente.