Para poder reemplazar los dientes perdidos y mejorar la función masticatoria alterada por la ausencia de la perdida dental, se pueden reponer los dientes mediante la colocación de implantes dentales.
Los implantes dentales son estructuras de titanio que se colocan quirúrgicamente en los huesos maxilares. El implante dental sustituye a la raíz del diente perdido, y después se coloca la corona sobre el implante. Estos son una muy buena opción para reemplazar los dientes perdidos. De esta forma, se recupera la función que realizaba el diente perdido.
¿Qué tipos de implantes dentales hay?
Los implantes dentales pueden tener varias clasificaciones, según el criterio utilizado.
Según la forma, de estos pueden ser cilíndricos o cónicos. Los implantes dentales de forma cilíndrica son los implantes más clásicos y más habituales. Permite que el hueso se desarrolle dentro, gracias a las perforaciones, dándole un anclaje. Los de forma cónica se utilizan normalmente en casos de implantes inmediatos, tras una extracción dental.
Según la conexión de los implantes, estos se pueden clasificar en implantes con conexión externa u interna. Los implantes dentales con conexión interna son los más actuales. Tienen distintas morfologías en su interior y poseen una distribución de fuerzas más adecuadas. Los implantes con conexión externa, son los más clásicos. El muñón del implante se localiza de forma fija al implante mediante un tornillo externo.
Según su superficie, los implantes dentales pueden tener la superficie con microrugosidades o nanorugosidades para favorecer su osteointegración.
Según su colocación, se distinguen los implantes yuxtaóseos o endoóseos. Los implantes yuxtaóseos o los implantes dentales se colocan justo por debajo de las encías en los pacientes con una altura ósea mínima. Los implantes dentales endoóseos se colocan dentro del hueso hueso maxilar o la mandíbula. Son los que hoy en día son más utilizados. Se colocan de forma quirúrgica dentro del hueso de forma osteointegrada, uniéndose al hueso de forma íntima.
Según la rehabilitación, los implantes se clasifican en unitarios o múltiples. Los implantes unitarios son los que se colocan uno y una corona dental (su respectiva). Los múltiples se colocan varios y se rehabilitan más dientes que implantes puestos.
El implante dental ideal varía en cada caso en particular. Es por este motivo, que la realización por parte del especialista de una buena historia clínica, una exploración detallada y la realización de pruebas complementarias pertinentes ayudarán al profesional a escoger la mejor opción de tratamiento para el paciente.