Las glándulas salivales se definen como un tipo de glándulas exocrinas del sistema digestivo, de modo que son las encargadas de la fabricación y posterior secreción de la saliva en la cavidad oral.
Este tipo de glándulas exocrinas puede ser clasificada según su tamaño en mayores o menores. Las glándulas salivales mayores son las glándulas parótidas, las sublinguales y las submandibulares. Y las glándulas salivales menores, se encuentran dispersas por la cavidad orales siendo estas las labiales, genianas, linguales, palatinas y molares.
Existen muchos trastornos de las glándulas salivales y para poder diagnosticar de forma adecuada alteraciones que pueden afectar a este tipo de glándulas es importante realizar una completa historia clínica, junto con una exploración clínica. En ocasiones es necesario la ejecución de pruebas complementarias, como podría ser una sialografía.
¿Qué es la sialografía?
El término sialografía proviene del griego de sialon y grafo, saliva y dibujo o imagen. Así pues, la sialografía es definida como una prueba radiológica mediante el cual se realiza un estudio de imagen, mediante contraste, de los conductos intraglandulares y extraglandulares de las glándulas salivales mayores.
Como se ha comentado, este tipo de prueba complementaria se utiliza gracias a la ayuda de un contraste, de radiopaco y yodado, y además de radiografía ionizante, como los rayos X para poder observar el recorrido del contraste.
¿Cuándo se debe utilizar la sialografía?
Gracias a este estudio radiológico, se permite detectar alteraciones de la anatomía localizadas en los conductos de las glándulas salivales.
De modo que es de interés diagnóstico en todas aquellas patologías que causan obstrucción o bloqueo en los conductos salivales, como por ejemplo: la sialolitiasis, la sialoadenitis o la sialoadenosis.
La sialolitiasis es la calcificación de los conductos salivales mediante la formación de cálculos salivales. Esta calcificación que existe dentro del conducto excretor puede estar relacionada con una disminución de la saliva o medicación. Es frecuente su aparición en las glándulas sublinguales. En la sialografía, los cálculos aparecen como unos defectos siendo estos con una densidad menor que el contraste.
La sialoadenitis es una inflamación por causa bacteriana o vírica que se asocia frecuentemente con una obstrucción completa del conducto salival. En la mayoría de casos aparece como una dilatación del conducto principal y presentando el contraste un retraso en la evacuación.
La sialoadenosis es una enfermedad caracterizada por el aumento del tamaño de las glándulas salivales, asociándose con enfermedades, como la hipertensión arterial o la diabetes, o a determinados fármacos, como las benzodiacepinas. En la sialografía se observa un tamaño más grande de los normal de la glándula y unos conductos más estrechos de los habitual y más separados entre ellos.
Es importante destacar que la sialografía puede demostrar que existe un obstáculo en el conducto, pero con ella no se puede demostrar la localización exacta de dicho defecto.