Los implantes de titanio, a causa de su rendimiento predictible en la clínica, se han utilizado ampliamente en la odontología por la sustitución de dientes ausentes. Después de su colocación en la cavidad oral, un implante tiene que interactuar con éxito con diversos tipos de células. Por este motivo, el titanio del implante y las propiedades de la superficie del implante pueden influir directamente en sus interacciones con las células, y por tanto afectar al proceso de osteointegración.
Los implantes dentales son estructuras en forma de tornillo. Los implantes dentales se colocan quirúrgicamente en el hueso maxilar para que, junto con la corona sobre implante, se rehabilite la zona edéntula y de esta manera restablecer la función dental y además la estética. Los implantes están hechos de un material biocompatible con capacidad de osteointegración, este material es el titanio.
¿Por qué los implantes dentales llevan titanio?
El titanio es un elemento químico que se encuentra en la tabla de los elementos periódicos con la posición 22 y el símbolo Ti. Su numero atómico 32 y forma parte del grupo de los metales de transición. El titanio es un elemento de aspecto plateado y se encuentra en su estado habitual en la naturaleza como un sólido.
Se trata de un material con una densidad baja, por lo que es ligero. Además, se encuentra con abundancia en la naturaleza. Tiene como grandes propiedades físicas su alta resistencia a la oxidación y a la corrosión. Además, no es un buen conductor eléctrico ni térmico, de modo que es un buen material para utilizarlo en los implantes dentales. Gracias a sus propiedades mecánicas, se puede moldear para que sea un elemento perfecto como utilidad en los implantes dentales. Su propiedad por excelencia es la biocompatibilidad, es decir es compatible cono los tejidos evitando la reacción de cuerpo extraño.
El titanio en los implantes dentales es titanio comercialmente puro y autoroscados. Aunque los primeros que se comercializaron no eran así. Las aleaciones de titanio se utilizan tanto en implantes dentales como en otros tipos de prótesis articulares.
Antes, los recubrimientos de los implantes dentales se realizaba con hidroxiapatita, pero en la actualidad está en desuso ya que las investigaciones científicas han demostrado que con el tiempo tienden a desengancharse de la superficie del implante y a provocar una pérdida progresiva de la osteointegración.
Mejor osteointegración gracias a los implantes de titanio
Los implantes dentales de titanio se someten a un tratamiento especial en la superficie de estos para poder garantizar una adecuada osteointegración de él. El tratamiento de las superficie se realiza para aumentar la superficie de contacto entre el implante y el hueso. Esto se puede realizar mediante un grabado ácido, un grabado mecánico, con arenado, una modificación electro-químico o un añadido de capas.
Cuando se realiza la colocación quirúrgica del implante, el titanio forma una capa de óxido de titanio en pocos segundo, que es el que se une al hueso. La parte de que se integra en el hueso es una cerámica, oxido de titanio.
Respecto la osteointegración de los implantes dentales de titanio, una superficie del implante rugosa permite una mejor osteointegración ya que al aumentar la rugosidad, se aumenta la superficie de forma que el patrón de osteointegración es mayor.