Las manchas blancas en los dientes son el resultado de varios factores. Por lo general, corresponden a áreas de esmalte (capa externa del diente) descalcificadas y, a veces este problema conduce al deterioro de los dientes. Mayormente, tener muchas manchas blancas puede ser causado por una deficiente nutrición, asuntos genéticos o también puede ser el resultado del uso excesivo de flúor. Algunos dentistas coinciden en que la primera evidencia de la caries dental también puede ser una lesión de mancha blanca. En algunos niños también aparecen manchas blancas en los dientes mientras éstos se desarrollan.
Las manchas blancas son el resultado de un determinado factor, pero no tiene por qué ser grave y en algunos casos, se pueden eliminar.
Causas de las manchas blancas en los dientes
Las manchas blancas en los dientes pueden ser el resultado de varias cosas. Pueden ser el resultado de la hipoplasia del esmalte (capa externa del diente), que es una falta de minerales. La hipoplasia del esmalte se debe a que durante la formación de los dientes no ha habido una mineralización correcta del esmalte dental y aparecen manchas blancas, sobre todo visibles en los dientes superiores de delante (incisivos). Se trata un defecto del esmalte dental que hace que los dientes tengan menos cantidad de esmalte de lo normal. Esta situación que afecta principalmente a la estética dental, aunque también podría llegar a perjudicar a la funcionalidad bucal.
Para solucionar esto, el paciente debe comer alimentos nutritivos y así cuidar de su salud en general no sólo los dientes. Al comer el tipo correcto de alimentos, se es capaz de tener una vida más sana. Los alimentos ricos en calcio y aquellos que son ricos en minerales pueden ser muy beneficiosos.
Las manchas blancas en los dientes pueden aparecer después de que se hayan producido cambios en el contenido mineral de los dientes de una persona (que sucede a menudo durante la infancia). También pueden aparecer en relación con una condición llamada fluorosis, que es el resultado de tener una ingesta excesiva de flúor durante el período de formación de los dientes. Las personas que viven en zonas donde el agua potable contiene un alto nivel de fluoruro a menudo se encuentra con este problema.
Las lesiones de mancha blanca también son comúnmente atribuidas a tener brackets u ortodoncia. Las personas con aparatos de ortodoncia a menudo tienen problemas para cepillarse correctamente los dientes y el resultado es una acumulación de placa (bacterias orales). Los ácidos, producto de estas bacterias, pueden dañar gravemente esmalte (capa externa) de los dientes y causar caries. La primera evidencia de este tipo de caries es la mancha blanca del esmalte descalcificado.
Tratamiento de las manchas blancas en los dientes
Los tratamientos para la hipoplasia dental o para las manchas blancas de los dientes suelen variar según la gravedad y severidad de la mancha. Normalmente, se suele usar una técnica llamada microabrasión dental para los casos más leves. En casos más graves con mayor cantidad de manchas se indica el tratamiento mediante carillas dentales sin tallar el diente.
Para solucionar este problema también se encuentra la alternativa del blanqueamiento dental, a través de este sencillo proceso conseguiremos eliminar las manchas localizadas en el esmalte (capa externa) del diente de una forma eficaz.
En el caso de manchas más severas, es necesario optar por otro tipo de tratamiento como la colocación de carillas de porcelana. Las carillas son unas pequeñas láminas que se pegan en la parte más externa de los dientes mediante un cemento o resina especial que las fija firmemente y revisten los dientes originales dejando a la vista una sonrisa mucho más atractiva.
Tal y como hemos podido ver existen todo tipo de enfermedades orales a tener en cuenta y por ello es primordial practicar todo tipo de técnicas preventivas para evitar la aparición y desarrollo de todo tipo de patologías orales. Entre estas técnicas hay que destacar la importancia de practicar una rutina de higiene oral diaria, buena alimentación, así como también, es imprescindible acudir al dentista de forma regular.